Desde la farmacia, a través de este post queremos compartir contigo sencillos pasos para que logres tener una rutina facial de noche mejor.
En primer lugar, en toda rutina facial se debe comenzar por la limpieza. Este paso tiene una gran importancia ya que gracias a él eliminarás la suciedad, maquillaje, polución o residuos que se acumulan en la piel a lo largo del día.
- Lo ideal en este paso será realizar la «doble limpieza. Consiste en utiliza primero un limpiador lipófilo (de tipo oleoso). Este limpiador nos ayudará a retirar con mayor eficacia residuos grasos y complejos como la crema solar, el maquillaje y el exceso de sebo. Tras el, deberemos continuar con un limpiador acuoso (tipo agua micelar, gel, etc.) que acabe de limpiar nuestros poros en profundidad. Gracias a este paso lograremos eliminar con mayor éxito toda la suciedad y poder pasar con el tratamiento intensivo nocturno. La doble limpieza tendrá un gran papel a la noche, ya que es en este momento del día en el que más posibilidad hay de que los productos que apliquemos trabajen y generen resultados.
Tras la doble limpieza, podremos aplicar de manera opcional un tónico o exfoliante mecánico (bolitas) para la exfoliación. Lo ideal será añadir uno o dos días fijos de la semana en los que exfoliemos la piel con el producto que mas se adecúe a nuestro tipo de piel. El tónico nos ayudará en especial para equilibrar el ph de nuestra piel, hidratar y tratar granitos o zonas más irritadas y el exfoliante mecánico nos permitirá retirar pieles muertas y vaciar la suciedad que ha logrado penetrar en los poros.
Una vez limpio el rostro, nos adentramos a trabajar la hidratación y tratamiento en zonas especificas. Lo mejor será comenzar por el contorno de ojos. Nuestra piel de ojos y labios es una piel diferente del resto y mucho más sensible y finita, por ello lo mejor es utilizar productos específicos para esa zona específica. La cantidad perfecta que deberemos aplicar de contorno será la del tamaño de un guisante. Lo aplicaremos desde dentro hacia fuera, a ligeros toques con el dedo anular, ya que es el que menos fuerza ejerce. Una vez aplicado el contorno, os aconsejamos aplicar un bálsamo labial para hidratar bien nuestros labios y asi, antes de aplicarnos el tratamiento, haber hidratado y trabajado las zonas más sensibles en una rutina facial de noche.
Una vez hemos hecho este paso, nos adentraremos en el tratamiento con el sérum. Deberemos encontrar uno en función a nuestro tipo de piel y a las necesidades que tengamos (acné, antiedad, reparación, hidratación, etc.) No todos los compuestos activos funcionan igual de bien en todas las pieles, como puede ser el caso del «Retinol» que hay pieles que no lo toleran bien y puede llegar a producir rojeces. Será importante para ello, acudir a un asesoramiento profesional en la farmacia o poneros en contacto para que os expliquen que activo os ayudará más. De este modo sabréis introducirlo poco a poco en vuestra rutina de cuidado facial para que vuestra piel lo tolere bien.
Como último paso, os recomendamos completar vuestra rutina facial de noche con una crema hidratante que corresponda a nuestro tipo de piel. Será decisivo conocer la cantidad de agua que es capaz de retener vuestra piel para saber si se encuentra deshidratada o no. Si sufre más perdida, necesitarás una mayor dosis de hidratación y una crema que refuerce la capacidad de retención de líquidos. Mantener la hidratación nos ayudará a ver nuestra piel mucho más joven y cuidada, consiguiendo una mayor sensación de confort.
